Pese
a que no en todos los torneos levantaron la copa, esto lo vienen haciendo desde
hace varios mundiales atrás. Mención aparte, el mundial deja otras grandes
lecciones:
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El futbol alemán viene de un proceso de transformación. Un proceso que no es de
la noche a la mañana, sino que ha tomado años. No han sido
"resultadistas". Por ejemplo, no cambiaron a su técnico cuando en el
mundial pasado no se hicieron de la copa.
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El trabajo en equipo: Mientras Brasil tenía a Neymar y Argentina en sus
partidos iniciales dependía de Messi, Alemania siempre tuvo un equipo. Costa
Rica y Colombia, son también otro gran ejemplo. A Colombia le asustaban
diciéndole que sin Falcao no llegarían lejos. Se equivocaron. A los ticos les
dijeron que estaban en el grupo de la muerte, y otros fueron los muertos. A
usted le pueden decir que su mercado está duro, que tiene mucha
competencia...le pueden decir eso y más, pero no le podrán acabar a menos que
usted se acabe en su propia mente. Ya alguien decía: "Si juegas solo
ganarás unos partidos, pero si juegas en equipo ganarás torneos". Tan
cierto y tan válido para campeonar en los negocios.
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Alemania pasó del juego basado en el "pelotazo", al juego táctico.
Jugó un fútbol racional, planificado y efectivo. Esto ha mostrado la
importancia de la estrategia en cualquier actividad. No se trata de salir a
jugar por jugar, sino de hacerlo para ganar. Y eso requiere estrategia. En el
lenguaje de los negocios diríamos que "no jugaron duro, sino
inteligentemente."
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La mentalidad y la disciplina jugaron su parte. El fútbol de los grandes tiene
su base en la disciplina. Los campeones saben que tarde o temprano la
disciplina se impone al talento y a la inteligencia. Lo decía muy bien ese gran
colombiano llamado Jorge Luis Pinto: "Lo que sucede es que en muchos
países latinoamericanos hay talento, pero los jugadores son más amigos del
trago y del escándalo, que del deporte". (sic)
Nada, absolutamente nada grande se logra sin
disciplina: ni en los deportes, ni en los negocios.
La mentalidad de los ganadores fue evidente:
una cosa es salir a jugar los partidos para no perderlos, y otra cosa es salir
a jugarlos para ganar. Note la diferencia y trasládela a los negocios: ¿cuántos
hay por ahí haciendo negocios con miedo a perder?
Hay tantas otras (quizá mejores) lecciones en
este Brasil 2014. Tantas otras, como la de los jóvenes James y Campbell.
Olvídese de tener "una buena edad" para triunfar. El éxito no conoce
edad. Si usted es joven empiece ahora...acuérdese de lo que decía el gran
Rockefeller: "La juventud es una etapa para sembrar y cosechar...empiece
temprano y no se arrepentirá."
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